sábado, 12 de septiembre de 2009

Los cuentos a los cuenteros, yo soy un ingeniero!

No sé porque lo hice, pero decir que no lo disfruté seria mentirme… Mentirte!

“tud… tud… tud… ”, click!

La verdad aun cuando quieren saberla, no siempre son todos capaces de soportarla. Mucho menos entenderla. Con el auricular en la mano, pienso si hubiera sido mejor una mentira, no para mí, me da igual. Lo hecho ya no tiene vuelta atrás y hecho quedará.

Y luego de la llamada y la última comida, llega él que se siente mejor dando sus bendiciones y orando por mí la ultima vez, porque la muerte se paga con la muerte. Y así debe ser, porque si no, creo que lo volvería a hacer.

Robe la vida a aquel que robo mi niñez madre. “… porque no pude decirte eso!?”